17.3.12

La falsificación de los sentimientos



Hay sentimientos puros, fuertes y autosuficientes. Paralelamente, a sus vertebras se instalaron falsificaciones que viven parasitariamente de ellas. Me pregunto ¿cómo distinguir entre las falsificaciones y los puros? Externamente no hay nada que ayude a aproximarme al conocimiento completo de su composición genética, ¿cómo saberlo?, ¿cómo saber si es un acto puro o simplemente un mecanismo de la bondad? Extrañamente, los actos buenos se naturalizaron de impresionante manera, que ante la mera manifestación de un acto contrario  estaría representando una falla mecánica: homo aparatus.

Siempre rige la misma agotadora melodía: el deber. Vida normativa. Vida seducida a la corrupción. Creación del remedio y de la enfermedad simultáneamente: breathe. Aspirar el silencio e intoxicarse de los más profundos pensamientos. Conducir sin faros. Conducir palpando temerosamente. Morir.  

Mary Florence
Marzo 2012

5.3.12

La misma moderna cosa

Come on and let it out, come one and let it out…(Jigsaw Falling Into Place - Radiohead). Simplemente caminar y contemplar lo tan lejano a nuestro alrededor. Simplemente obedecer lo tan ajeno a nuestro ser. Simplemente cotejar las manías del poder. Simplemente respirar el olvido y el start again.
Freedom vs liberty: ¡cuánta idiotez humana! Porque un sacrificio equivale a la interrupción de la ausencia de trabas a mis movimientos… sí, MIS movimientos: beberé de la sangre del individualismo -consecuentemente hedonista- hasta que la muerte me halle rindiéndome culto, martirizándome, o alabando a mis genios.
 Un sacrificio, una promesa, una delegación de self-power es un riesgo colectivo. Y me atropella la gente, y ya ni los miro… mi cuerpo genera esa extraña sustancia auto-defensiva llamada “aversión”. La aversión ciudadana es la máxima expresión del hombre individualista. Somos millones y somos nada. Mil voces internas buscan el diálogo telepático con esos millones, pero esos millones viven subsumidos en mundos diferentes, o en una realidad que parece desglosarse en múltiples hojas, cada una de ellas inconmensurables. Me apena el hecho de saber que perdimos ciertas sensibilidades primitivas… y con primitivas no me remito a una crítica peyorativa de tilde iluminista, sino más bien con un valor intrínsecamente humano. El intercambio de miradas, la comunicación del sexto sentido: comunicación. Miradas blancas, grises, y negras: miradas indistintas.
 El paso sincronizado  por el mandato de la responsabilidad, o impuesto por la música que ametralla nuestros oídos, concreta una perfecta coreografía. Millones que se desplazan a un lugar. Millones que se dirigen a ser olvidados, o con suerte recordados por unos pocos. Millones que se congregan en un cementerio, que ya nada tienen por hacer o cumplir. En una caja vivimos, y en otra caja vivimos la muerte. Celebramos la muerte con hastío y vivimos cada día de la misma manera. Las líneas divisorias entre muerte y vida terminaron de fundirse, y la dicotomía se unió inesperadamente en una armonía. 
Un relato más que nunca dejará de tener un fin.



Mary Florence
Marzo 2012